martes, 12 de noviembre de 2013

Noche de tormenta: 


     Son las 12:08 de la noche, llevaba varios días haciendo borradores sobre este ensayo, quería exponer mis ideas, dar sólidos argumentos de mi forma de pensar, hacer ver a la gente el problema de los jóvenes, quería crear opinión y hasta convencer.

     Lo he tirado todo, y me he puesto a escribir a estas horas de la noche, pensareis que estoy un poco colgado, pero estaba viendo un programa en tele 5, una de las cadenas que más denigra a la familia y a la mujer. Se trataba de un programa donde entrevistaban a distintos jóvenes y ellos enseñaban sin ningún pudor su forma de vida.

     Me llamo especialmente la atención un chico, no sería mucho mayor que yo, el joven enseñaba su casa en la que vivía solo, era un chico musculoso, que según él se cuidaba para verse bien. La periodista le preguntó por qué no tenia libros en su casa, el joven respondió diciendo: “no me va eso de leer, me parece de panolis, además en esta vida ya no hace falta estudiar para ganar dinero y triunfar, vale con estar fuerte, ligar con chicas y hacerte un hueco en la tv”.

     Como el chico exponía, se dedicaba a estar en forma, verse bien, cuidarse y ligar con las máximas chicas posibles para llevárselas a la cama. Otra cosa que llamó mi atención fue su siguiente modo de pensar, este joven tenía una foto de una chica, explicó que fue su única novia, que la guardaba como un recuerdo, ya que ahora él no quería tener más novias para poder ligar con las máximas chicas posibles, o “nenas” como él decía.

     Esta escena me dio que pensar, no me hizo gracia como alguna vez me había ocurrido, sino más bien todo lo contrario, tristeza. Poco después salió una chica que tenía el mismo “modus operandi”. Me pregunté cómo lo vería la gente, y me entristecí más todavía al pensar que a muchos jóvenes este pobre chico les causaba admiración y lo tenían como un modelo a seguir.

    Me invadió una sensación muy rara, no me podía dormir y me puse a escribir, me hacía muchas preguntas: si en teoría cuando se es joven se tiene ilusión, ganas por conseguir cosas grandes ¿cómo se ha podido llegar a un planteamiento de vida tan primario, donde prima al placer y lo que apetece?, ¿dónde están esas ganas de cambiar el mundo, de llegar lejos en esta vida?

     ¿Qué es de ese amor de juventud donde se deseaba encontrar a aquella persona para compartir la vida, para conocerla y poder tener un proyecto de futuro juntos? Quererle por lo que es, respetarle o a fin de cuentas entregarse. Ahora ya no es para toda la vida, es hasta que me canse. ¿Por qué la juventud de hoy en día tiene miedo al compromiso? ¿Dónde han quedado esas grandes aspiraciones?

     ¿Qué les ha pasado a las chicas?, ya no se hacen respetar, se comportan como chicos. ¿Qué les ha pasado a los hombres?, lo único que les importa es tener musculitos para poder lucirlos, atraer a ese nuevo y, en teoría, moderno prototipo de “mujer” para tener relaciones con ellas.

     Estoy lleno de preguntas, hay cosas que no logro entender, y es a mi juventud a la que no entiendo. ¿Soy el raro de esta sociedad?

     Me voy a la cama, ya se ha hecho tarde, pero la soledad me invade, me siento solo, y con una duda, ¿me dejará esta sociedad conseguir lo que yo quiero y de la manera que quiero?

    8:15 de la mañana del día siguiente: me han entrado ganas de escribir y estoy lleno de dudas, ¿qué me diferencia de los otros jóvenes?

 Tengo ganas de cambiar esto, y ¿tú?

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